Los trabajos de conservación y reparación de carreteras requieren en muchas ocasiones delimitar zonas de la calzada, debidamente señalizadas, para que los operarios puedan trabajar con mayor seguridad. Pese a esta señalización, algunos conductores bien sea por despiste o imprudencia circulan por estos tramos a una velocidad inadecuada que puede poner en peligro la integridad de los trabajadores.

Investigadores del Departamento de Ingeniería Civil de la Universidad de Minesota han ideado un sistema de alerta destinado a los conductores que acceden a una de estas zonas de trabajo ignorando la señalización para que, a través de señales visuales y acústicas, se percaten y reduzcan su velocidad.

Lo han denominado Intelligent Drum Line (IDL). Se compone de dos balizas o dispositivos de señalización (Drums) que han de situarse previamente (120 y 90 metros) a la línea de conos que delimitan la zona de trabajo. Ambos dispositivos poseen elementos para la alerta visual y auditiva.

El primer dispositivo mide la velocidad y localización de los vehículos que se aproximan, si la velocidad es mayor que el umbral de seguridad determinado, el sistema activa el aviso visual (luces intermitentes) en ambos.

Cuando el vehículo se acerca a una distancia aproximada de un segundo de la primera baliza, se activa la alarma auditiva, una potente bocina. Cuando el vehículo rebasa el primer dispositivo se apaga la alerta auditiva del mismo y el proceso se repite entonces con la segunda baliza.

Estos dispositivos son móviles y de fácil colocación en cualquier lugar donde sean necesarios y pueden ayudar a evitar muchos accidentes de trabajo. Las pruebas realizadas hasta ahora con los prototipos han revelado que es un sistema eficaz para el aviso a los conductores. El siguiente paso es poder pasar las pruebas de resistencia a colisiones que establece la Administración Federal de Carreteras (FHWA).